Tierra de contrastes con una orografía indómita y cautivadora, Castellón es una provincia dual que disfruta de la caricia del Mediterráneo, invitando a perderse en su Costa del Azahar bajo la luz de un sol inagotable.
Siglos después de que la naturaleza esculpiera sus abruptas montañas frente al mar, llegaría un legado histórico que ayudaría a forjar el aspecto y el carácter de Castellón cambiando el rumbo de su historia.
Obstinado y firme en sus convicciones, el Papa Luna convirtió un castillo templario en el centro del mundo occidental, marcando el destino de estas tierras y sembrando la provincia de fortalezas y murallas que se fundieron con la roca para ofrecer paisajes en los que la naturaleza se funde con la mano del hombre.
La huella de templarios, árabes y reyes dio paso a joyas arquitectónicas que pasarían a convertirse en las principales atracciones turísticas de Castellón; el inexpugnable Castillo de Peñíscola, que se adentra en el mar como un navío de piedra, la imponente silueta amurallada de Morella coronando las cumbres del interior, o la belleza subterránea de las Cuevas de San José, que esconden el río navegable más largo de Europa.
Con un clima benévolo impregnado del aroma a azahar, Castellón vive inmersa en una luminosidad mediterránea que la convierte en el destino ideal para combinar el turismo de mar y de montaña en cualquier momento del año.
La provincia cuenta con 120 kilómetros de costa sobre los que se extienden espacios tan sorprendentes como las elegantes villas de la Belle Époque en Benicassim, la naturaleza virgen y salvaje de la Sierra de Irta, o el pequeño paraíso volcánico de las Islas Columbretes.
Dejando a un lado el azul infinito de su litoral y su vibrante costa, Castellón es silencio, historia, tradiciones y vanguardia. Siguiendo los senderos del interior, nos encontramos con una tierra llena de autenticidad que ha sabido mantener su esencia rural y hospitalaria a pesar de haberse transformado en un destino turístico de referencia.
El turismo en Castellón tiene un sabor inconfundible. Es el sabor de los arroces a banda cocinados a fuego lento, la excelencia de la Alcachofa de Benicarló y el Langostino de Vinaròs, o ese aroma intenso y sofisticado del "diamante negro" que encontraréis en la cocina del interior: la trufa negra del Maestrazgo.
Nuestra guía de Castellón os ayudará a obtener toda la información necesaria antes del viaje para que una vez que estéis allí solo os dediquéis a disfrutar. Para comenzar a conocer Castellón, lo mejor es empezar leyendo sobre la historia de la provincia y la información práctica que os será de utilidad durante el viaje.
Después de conocer los aspectos básicos de la provincia, os recomendamos echar un vistazo a los principales lugares que ver en Castellón para planificar vuestro viaje de la mejor forma posible.
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